Clorador Salino
Ventajas de la cloración salina
- El agua salina es un antiséptico natural que inhibe la formación de bacterias y algas, actuando para la piel del bañista de una manera natural.
- Evita los trastornos oculares y dermatológicos producidos por el sistema tradicional, ya que la baja concentración salina es similar a la que hay en la lágrima del ojo humano.
- No hay riesgo de intoxicación ni incendio o explosión, al no utilizar productos químicos ni necesitar almacenarlos. La única materia prima utilizada es la sal.
- Desaparece el ambiente corrosivo de las salas de depuración y los malos olores en piscinas cubiertas. Además, el personal de mantenimiento trabajará en mejores condiciones.
- La sal permanece en el agua en un proceso cerrado y permanente, que permite mantener el agua sin cambiarla durante varios años.
- Supone un ahorro del 80% en el mantenimiento y un 100% en productos químicos (ya que carece de ellos). Una vez amortizado el equipo, el costo de producción es un 90% menor frente al del cloro tradicional.
- Favorece el bronceado, por el yodo contenido en la sal, y hace innecesaria la ducha posterior.
- Protege el cabello y no estropea los trajes de baño.
- No produce ni el olor ni el sabor desagradable característico de los sistemas de cloro tradicional.
- Es automático y extremadamente sencillo: se enciende el equipo y se ajusta la producción de cloro requerida. Se adapta a cualquier sistema existente, sin necesidad de obra civil, ni de cambiar la antigua instalación.
Se trata de un proceso cerrado en el que no hay pérdida de ningún producto. Los productos se descomponen, actúan y se vuelven a regenerar. Esto explica que la concentración de sal permanezca constante. Las reposiciones de sal se harán fundamentalmente por la pérdida de agua del lavado del filtro, lluvias y uso del vaso de piscina.